Propuesta de ejercicio estricto

Voy a arreglar mi mundo

CONSIDERACIÓN BÁSICA:

La única forma de "escapar" del mundo que no me gusta, es rechazando mis "pensamientos de ataque":
Porque sé que mis pensamientos son los que crean el mundo que veo...
y, si este tiene cosas que no me gustan para nada...
¡Debe haber una parte de mi pensamiento, que está equivocada!

PRÁCTICA:

Cada vez que detecte en mi mente un pensamiento de ataque a alguien, o a algo,
¡Debo cancelarlo!
Borrarlo
Ignorarlo
Eliminarlo.
Igualito a cuando detectaba pensamientos ajenos
infiltrados a través de los medios, de la propaganda o del condicionamiento pesimista de otros.

ANÁLISIS:

Revisando, con calma... ¿Cuáles serían esos pensamientos de agresión...?
¡Son muchísimos!
Ataco mentalmente a la gente. A los políticos. A mi situación. Al Sistema. A los periodistas. Al que me contradice. Al que no se acuerda de mí. Al que es superior a mí. Al que es inferior a mí, también lo ataco (al menos, mentalmente).

Con razón, el mundo que veo, ¡tiene cosas tan locas y tan feas!

RESULTADO:

Si no ataco al mundo,
no voy a caer en la ilusión de temer que él se defienda de mí.

¡Bravo!!

L22. Lo que veo es una forma de venganza.

La idea de hoy describe con gran precisión la manera en que todo aquel que alberga en su mente pensamientos de ataque, tiene que ver el mundo. Habiendo proyectado su ira sobre el mundo, lo que ve, es la venganza a punto de devolverle el golpe.
De esta manera, percibe su propio ataque como un acto en defensa propia.

Esto se convierte progresivamente en un círculo vicioso hasta que esté dispuesto a cambiar la manera como ve las cosas. De lo contrario, los pensamientos de ataque y contraataque le consumirán y poblarán todo su mundo.

¿De qué paz mental podría gozar en tales condiciones?

¡De esta fantasía salvaje es de lo que te quieres escapar!

¿No es maravilloso recibir las buenas nuevas de que no es real?

¿No te alegra sobremanera descubrir que te puedes escapar de ella?
Tú has fabricado lo que deseas destruir; lo que odias y lo que quieres atacar y matar.

¡Nada de lo que temes existe!

¡Si me avisaran hoy!

Si me comunicaran por algún medio...

...una tableta de escritura cuneiforme espacial, dejada caer por un platillo volador en mi jardín...

Si hoy alguien me avisara...! 

Que soy Uno con el Infinito...

¿Qué haría?

1. Me sentiría libre!
2. Estaría radiante de poder y de alegría.
3. Sonreiría sin parar y parecería un poco loca de entusiasmo!
4. Asumiría mi cargo: ¡Libretista cinematográfico de la vida! Todas las posibilidades imaginación y de producción de historias hermosas y edificantes, llenas de color y de afecto, con mucha vida y creatividad.

Mis personajes serían afables y seguros de sí mismos. Nadie atacaría a nadie, pues nadie puede ser atacado. ¡Desaparecería el miedo del planeta! y sin miedo, no existirían los conflictos.

Viviríamos sin envidias, historias fascinantes, iluminadas de alegría, fraternidad y belleza natural. ¿Cómo envidiar, si a voluntad puedo crear el filme que desee para experimentar?

Verde diversidad por todas partes, exhuberante, vibrante, deleitándome, a mí y a los demás. Jugando con el huerto... acariciando mi perrita, las aves, los felinos, las flores sonrientes, las serpientes...

Abundancia a disposición... oro para hacer lindos símbolos de la etapa de avance de cada cual... plata... cobre... bronce en obras de arte... vidrio... porcelanas exquisitas... mis orgonitas.

¡Salud por doquier!! ¿Qué temor podríamos tener? ¡Yo ya no tosería más!

Encontraría a mis semejantes... todos con el mismo motivo de fondo: El Infinito.

Sensación de plenitud permanente, porque nada me podría afectar. ¿Cómo sentirse afectado negativamente, si todo es brillante, vital y amigable? Impermanente, ¡sí! porque ése era el plan. Nada es definitivo ni inmodificable... No hay que sorprenderse. ¡Ese era el plan de juego!

Si me llegara un comunicado, con sellos, con mi nombre y apellido manifestandome: "¡Eres Uno con el Infinito!" Me pondría colorada de vergüenza por tanto zafarrancho que he hecho en el pasado, desconociendo mi noble origen y quejándome de mi entorno; todo producto de mi pequeñez.

Estaría totalmente libre... ¡Ya no podría estar prisionera! ¿sentirme presa de qué? ¿de pensamientos implantados mediante una simulación? ¿quién se atrevería a implantarme algo, que sé que no me conviene? ¡Soy libre desde mi origen!

Abriría los ojos, renovaría mi mentalidad y Te sabría siempre a mi lado, compartiendo diversión e inteligencia!

¡No se puede pedir más!!

(¿Y estaré tan lejos de recibir esa misiva?)