La Teosofía, una línea de pensamiento espiritual que se desarrolló en el siglo antepasado y que se opone a toda "revelación", tiene gran número de textos y autores que recopilan una maravillosa sabiduría espiritual, mucha de ella Pre-Búdica y en consecuencia, Pre-Cristiana.
El siguiente fragmento del libro de la muy sabia teósofa rusa del siglo XIX, Helena Blavatsky nos recuerda algunos conceptos sobre el muy famoso EGO, a los que hemos llegado por caminos muy diferentes en nuestro divagar en el conocimiento, pero que sueñan muy familiares a nuestros oidos.
LA VOZ DEL SILENCIO
Las presentes instrucciones son para aquellos que ignoran los peligros de creer en las facultades inferiores.
Aquel que pretenda oír la voz del NADA «el Sonido Insonoro», y comprenderla, tiene que enterarse
de la naturaleza del Dâranâ (Meditación/Concentración)
Habiéndose vuelto indiferente a los objetos de percepción, debe el discípulo ir en busca del Rajá (rey) de los sentidos, al Productor del pensamiento, de aquel que despierta la ilusión.
La Mente es el gran destructor de lo Real.
Destruya el discípulo al Destructor.
Porque: - Cuando su propia forma le parezca ilusoria, como al despertar las formas que en sueños ve,
- Cuando él haya cesado de oír los muchos sonidos, entonces podrás discernir el UNO, el sonido interno que mata el externo.
- Entonces únicamente, y no antes, abandonará la región de Asat, lo falso, para entrar en el reino de Sat, lo verdadero.
- Antes de que el alma pueda ver, debe haberse alcanzado la Armonía interior, y los ojos carnales han de estar cegados a toda ilusión.
- Antes de que el alma pueda oír, es menester que la Imagen (hombre) se vuelva tan sorda a los rugidos como a los susurros; a los bramidos de los elefantes furiosos, como al zumbido argentino de la dorada mosca de fuego.
- Antes de que el alma sea capaz de comprender y recordar, debe estar unida con el HABLANTE SILENCIOSO, de igual modo que la forma en la cual se modela la arcilla, lo está al principio con la mente del alfarero.
Y entonces al oído interno hablará LA VOZ DEL SILENCIO, y dirá:
"Si tu alma sonríe mientras se baña en la luz del Sol de tu vida;
si canta tu alma dentro de su crisálida de carne y materia;
si llora en su castillo de ilusiones;
si pugna por romper el hilo argentino que la une al MAESTRO sabe, discípulo, que tu alma es de la tierra.
Cuando tu alma en capullo presta oído al bullicio mundanal;
Cuando tu alma en capullo presta oído al bullicio mundanal;
cuando responde a la rugiente voz de la Gran Ilusión;
cuando temerosa a la vista de las ardientes lágrimas de dolor,
y ensordecida por los gritos de desolación, se refugia tu alma,
a manera de cautelosa tortuga, dentro de la concha de la PERSONALIDAD,
sabe, discípulo, que tu alma es altar indigno de su Dios silencioso.
Muy clara alusión al mundo ficticio de los sentidos y al mundo real de Dios en la forma en que queramos llamarlo: Nada, Silencio, Maestro o Hablante silencioso.
En consecuencia, recomiendo la lectura de La Voz del Silencio y la de las decenas de libros de esta misma autora.
El gran maestro espiritual Emilio Carrillo dedica muchos videos recientes a divulgar y explicar la Teosofía. Coloco aquí uno de ellos, para quien quiera profundizar en esta escuela de pensamiento.
En consecuencia, recomiendo la lectura de La Voz del Silencio y la de las decenas de libros de esta misma autora.
El gran maestro espiritual Emilio Carrillo dedica muchos videos recientes a divulgar y explicar la Teosofía. Coloco aquí uno de ellos, para quien quiera profundizar en esta escuela de pensamiento.
Ojo cuando habla del "Alma Modulable", intermedia entre la frecuencia de Dios (el Espíritu del vacío, o Mónada) y la materia, que daría origen a las almas aparentemente individuales, (Yo Superior), representadas como las hojas de un árbol (el Alma Universal). Esa alma es oscilante entre las dos otras. (Dualidad?).
El Espíritu no tiene instrumentos para ser consciente en la materia. No puede conocerla.
Entonces pone en marcha un proceso de descenso para envolverse en la materia.
El Espíritu no tiene instrumentos para ser consciente en la materia. No puede conocerla.
Entonces pone en marcha un proceso de descenso para envolverse en la materia.