lunes, 15 de septiembre de 2025
Pulso Conciente de la Armonía
sábado, 28 de junio de 2025
Los dos Asesores de la Mente
No sé si a ustedes les pasa, pero a veces siento que mi cabeza es como la oficina de un presidente en plena crisis. Hay un ruido constante, teléfonos que no paran de sonar, informes urgentes apilándose en la mesa... el banco... un caos. Y en medio de todo, estoy yo, quien se supone debe tomar las decisiones, sintiéndome completamente abrumada.
Lo que les voy a recomendar se parece un poco a lo que nos decían cuando niños: Que un diablito nos hablaba en la oreja izquierda cosas inconvenientes, mientras un angelito (la voz de la conciencia) nos aconsejaba correctamente en el oído derecho.
El Asesor N.1: El asesor del Pánico (El Ego)
Este es el que más grita. Es el que entra a la oficina a la carrera, con la cara desencajada y un montón de carpetas bajo el brazo que dicen "URGENTE" y "PELIGRO".
Lo reconozco porque su lenguaje es siempre el mismo:Empieza con: "¡Tienes que...!", "¡Cuidado con...!", "¡No puedes permitir que...!".
Habla rapidísimo y siempre sobre el pasado (lo que hice mal, o lo que me hicieron a mí) o sobre el futuro (todas las catástrofes que están a punto de ocurrir).
Su consejo siempre se basa en el miedo, la defensa y el ataque. Si me llega un correo, me dice: "¡Responde ya! ¡Deja claro que no fue tu culpa! ¡Cúbrete las espaldas!". Y si alguien se me cuela en el tráfico, es el que grita: "¡Pítale! ¡Que se quite! ¡No dejes que se salga con la suya!".
Para ser sincero, durante la mayor parte de mi vida, he pensado que este asesor era el único que había. El más realista. El que me protegía. El resultado, claro, fue vivir con un nudo constante en el estómago o un disgusto inexplicable.
El Asesor N. 2: El asesor Silencioso (El Espíritu de la Paz)
Luego está el otro consejero. Este es muy diferente. Rara vez levanta la voz. De hecho, casi siempre está sentado tranquilamente en un rincón de la oficina, esperando pacientemente a que yo lo consulte.
Su forma de comunicarse es mucho más sutil:No trae problemas, sino que trae perspectiva.
Su voz no es de pánico, sino de calma. A veces ni siquiera son palabras, es más bien una intuición que me dice: "Espera. Respira. Hay otra manera de ver esto."
Nunca habla del pasado como una carga ni del futuro como una amenaza. Su único interés es devolverme la paz en el presente.
Frente al mismo correo del trabajo, este asesor simplemente me inspiraría a hacer una pausa. Frente al coche en el tráfico, me recordaría que mi paz vale más que tener la razón durante dos segundos.
Aquí es donde todo ha empezado a cambiar para mí. Me he dado cuenta de que mi trabajo no es resolver todos los problemas que me trae el Asesor del Pánico. Mi único trabajo real, aquí, sábado por la mañana y el resto de la semana, es elegir a qué asesor escuchar.
Así, la práctica se me ha vuelto muy simple:
Hago una pausa y lo reconozco: "Ah, es él otra vez, con sus carpetas rojas."
Respiro hondo y, deliberadamente, giro mi silla imaginaria hacia el Asesor Silencioso y le digo: "Ya escuché la opinión del miedo. Ahora quiero escuchar la tuya. Quiero paz en lugar de este caos."
No siempre funciona al instante, pero cada vez que lo hago, siento como si le bajara el volumen al ruido y empezara a sintonizar otra emisora mucho más tranquila. ¡Estoy construyendo mi paz!
Quizás el despertar del Durmiente no sea más que esto: Aprender, día a día y momento a momento, a esquivar los servicios al asesor del pánico y decirle amablemente: "Gracias, pero hoy no te escucharé. Hoy voy a consultar con mi otro consejero."
miércoles, 25 de junio de 2025
Si Cristo... ¿no fuera exactamente Quien nos contaron?
Llevo un tiempo dándole vueltas en la cabeza a una de las palabras más pesadas e intimidantes de Un Curso de Milagros: "El Cristo".
El término es confuso en la religión, donde se funde con la persona de Jesús sin mayor explicación; igualmente, en otras doctrinas esotéricas en las que, peor, me hacen pensar en un gran espíritu que envuelve el planeta.
No sé ustedes, pero a este respecto, yo crecí con una idea de una figura histórica, divina, única, crucificada... y muy, muy lejana a mí. Alguien a quien admirar, pero definitivamente alguien que "no era yo".
Pero mientras más avanzaba en el camino de Un Curso de Milagros, más me daba cuenta de que esas ideas se quedaban cortas. Y allí, la respuesta que encontré es tan simple y a la vez tan enorme, coincidiendo con la filosofía que hemos elaborado hasta el momento:
El Cristo somos todos. Es nuestra verdadera identidad. La tuya, la mía, la del vecino.
El otro día, conversando sobre esto, surgieron un par de ideas que me ayudaron a ponerlo en palabras: El Cristo es como "la Hermandad (Filiación) Autoconsciente". O sea, es esa totalidad nuestra, pero despierta, consciente de sí misma, sin la amnesia que nos hace creer que estamos solos y separados.
O también, se podría definir como "la Hermandad Radiante", porque su naturaleza, cuando no está tapada por nuestras nubes de miedo y culpa, ¡No puede hacer otra cosa que brillar!
Ok, suena genial. ¿Pero qué hace alguien con esto un lunes por la mañana en medio de un trancón?
Y creo que ahí está la magia de todo el asunto. La forma de recordar que yo soy ese Ser radiante, es empezar a buscarlo en los demás. La práctica es dejar de ver al conductor de al lado como "el que se me va a colar", al jefe como "el que me presiona" o al político de turno como "el que nos va a arruinar".
La práctica sería hacer una pausa, respirar y pedir ayuda para ver más allá del disfraz. Pedir ver claramente a ese otro pedacito de la Filiación que, igual que yo, está dormido y asustado. Cuando logro, aunque sea por un segundo, ver la luz en esa otra persona, algo en mí se enciende. Es como si al reconocer al Cristo en él, mi propio Cristo interior se desperezara un poquito.
Así que ese sería el plan. Tratando de recordar que el Cristo no es una estatua en una iglesia ni una figura en un libro de historia.
El Cristo es la verdad de lo que somos, esperando pacientemente a que dejemos de pelearnos con las sombras en la pared y nos demos la vuelta para mirar la Luz.
sábado, 24 de mayo de 2025
El chispazo
del caos burbujeó hoy.
Nocturna revelación, la mayor de este sendero
me soluciona de un tajo la angustia subyacente
que el profundo gozo de mi juventud robara.
Que Dios sea INFINITO, dentro y fuera de todo lo existente
-ya no externo ni antropomórfico-
Que sea explosión sin límite... Energía creadora y destructora de mundos a la vez
No significa que no podamos tener una relación PERSONAL e íntima con Él.
Más bien, este impávido Dios monista, el de Spinoza…
¡Se nos torna más fácil de abrazar! Más fácil de admirar y saborear.
¡Eureka! Ya puedo volver a hablarle y consultarle
nimiedades -en infantil complicidad-
Volver a mostrarme enamorada con pequeños versos
y retozar en su inminente compañía
…Recurrir a Él, confiada, en recodos inciertos.
Envolverme en su pensamiento sonriendo a cada paso!
¡Regreso al Edén! Recupero ese mismo inmenso gusto
que cada inhalación al avatar casi explotaba
como emanada radiación de un Rey de Reyes
paseando gustosa por La Tierra.
sábado, 17 de mayo de 2025
Lucidez final
Rodeado de poblaciones espectrales, el Durmiente
cohibido en el centro de la escena
interactúa simulaciones.
Instantes de luz, equivocaciones, vanos triunfos ¡llanto!
Perseguir apoyo, aprobación al menos...
¡Inexistente compañía! ¡Traición y olvido!
¿Cuál será el secreto de los exitosos? Irresoluble cuestión. Insondable Secreto de ocultistas.
Pequeñísimo se vuelve... y mareado...
insignificante entre volubles sombras e inalcanzables metas
apabullado por distracciones y conflictos.
-Desesperación solo resta a su existencia-
Asombroso: ¿Por qué no se suicida?
¿Cuándo abrirá los ojos? -en el fulgurante Palacio se preguntan-.
¿Cuándo asumirá su trono? (Centro del Universo sufre distraído...)
Atesorado y protegido por el Poder Más Grande:
¿Te ha hecho más consciente
el sueño de hoy, Cariño Mío?
jueves, 28 de marzo de 2024
¡Nunca seremos presas de la Depresión!
LA REALIDAD
LA DEPRESION COMO ENFERMEDAD
Los ritos del dios de la enfermedad son extraños, pero muy estrictos. En ellos la alegría está prohibida, pues la depresión es la señal de tu lealtad a él. En síntesis, la depresión significa que has abjurado del Infinito. La gente rechaza las blasfemias, mas no entienden que la blasfemia va contra ellos mismos también: No se dan cuenta de que negar al Infinito es negar la propia Identidad y no tener identidad es lo que nos deprime.
El ataque al Infinito les hizo pensar que eran huérfanos, y como resultado de su depresión inventaron al dios de la depresión.
LA SALIDA:
Nota: En esta y en las próximas entradas vamos a analizar a la luz de Un Curso de Milagros, conceptos que usamos diariamente pero que, siendo sinceros, no comprendemos.
Este libro magnífico ha resultado ser una descripción precisa de nuestra compleja situación en esta dimensión 3D; lo que pasa es que está en clave; por eso no vemos su aplicación directa. Entonces, descifrar un poco esa clave, usando palabras menos solemnes, con vocabulario más cotidiano, permitirá que lo podamos aprovechar en nuestra ruta de salida por el Laberinto de la Realidad.
martes, 5 de marzo de 2024
¡Ojo! ¡El Astral se nutre de nuestras emociones!
Estamos en un momento complicado. Nadie lo puede dudar.
Vemos conflictos por un lado y otro... problemas en cada país... Políticas, a veces supranacionales, absurdas. Enfermedades que se renuevan y problemas en la economía que afectan a todos. Todo cabeza abajo. ¡No se entiende este mundo!
¡Qué locura!
Y ¿por qué estarán pasando tantas cosas negativas? y ¿Por qué las nuevas generaciones andan tan perdidas? ¿Por qué ya no disfrutan la juventud? parecen zombies... y no conocen nada más... Ya no hay aventuras, ya no hay amistades, ya no hay inventos, emprendimientos, inteligencia, historia ¿nada para ellos? ¿Fue, acaso culpa de los padres que no les enseñaron a vivir como humanos?
Pues, ¡Parece que no fue falla de los padres!
Hay un detalle que enciende la comprensión de todoeste asunto y que les voy a contar hoy, pues es muy importante que lo entiendan para corregir su propia actitud y, liberarse de una esclavitud colectiva que ni siquiera reconocemos.
Voy a separar por hitos importantes:
PUNTO 1. Hay que darse cuenta de que Nada está sucediendo de manera aleatoria: ¡Se trata de un solo plan! Una sola idea impuesta por alguien o algo a la Humanidad, reforzada por todas partes y avivada por personas inconcientes y organizaciones aparentemente diferentes, pero que tienen una sola raiz.
Me pueden decir que vuelvo a la conspiranoia... No... Pero ¡sí! Lamentablemente debo hacerlo para llamar la atención de aquellos que se mantienen conformes en el ignorado vacío que llaman "vida" y no se hacen nunca una pregunta profunda.
Empecemos por el principio. La Gran Hipótesis:
Sabemos que somos un ser energético... magnético, vibracional, eléctrico casi.
Sabemos que tenemos un cuerpo físico, otro de emociones (astral) y otro mental. Y otros niveles mas como el espiritual... Sin embargo, hoy nos interesa el Astral.
Pues, sucede que el Nivel Astral se nutre de emociones, por definición.
Esas mismas emociones que buscamos ávidamente y que confundimos con la "felicidad" porque su disfrute instantáneo nos hace creer que estamos vivos.
PUNTO 2. Así es: ¡El Astral se nutre de nuestras emociones! Lo mismo que los sentimientos funcionan en otro rango de frecuencia, el misticismo en otro... el intelecto en otro. Pero la estrella hoy es la emoción y por lo tanto, hablaremos de cómo opera el nivel de las emociones: el Astral.
Lo mismo que en esta 3D material donde funcionamos la mayor parte del tiempo, en el Astral hay de todo: Ideas locas, odios flotantes, gente buena, gente miserable, gente arrepentida, gente desdichada, gente loca... de todo. El astral como "sitio" se puede asimilar un poco al Purgatorio del Cristianismo. Y es también el loco Mundo de Los Sueños Nocturnos, donde todo es absurdo, superpuesto, instantáneo, borroso.
Hay niveles allí, por lo tanto, para escoger... Como cuando entramos en reverso (con miedo o con ira, por ejemplo) y terminamos en una pesadilla.
Así que, lo mismo que las oraciones de unos creyentes pueden ser bálsamo para un culpable arrepentido cuya mente se encuentre sufriendo allá por un tiempo, también la ira, la violencia, los insultos, la guerra, se sienten allá y son "disfrutados" por seres afines a esta energía oscura que, sin ese combustible se desvanecerían pronto en ese mundo de sueños y emociones.
PUNTO 3. (Aquí hay un vacío de información, pero discutirlo no importa por ahora)
El hecho es que de alguna forma, el nivel Astral se ha dado "cuenta" del potencial de la Humanidad para producir emociones que lo alimenten y, por todos los medios (a lo mejor también mediante "infiltrados" y poderosos) ha deformado paulatinamente nuestra Percepción para orientarnos hacia la generación de este tipo de vibración densa.
PUNTO 4. ¡Ya está! ¡Aquí se encuentra la Humanidad! Verdaderos zombies, esclavos dentro de un Sistema que ya está tan perfccionado, que pareciera real y lo peor, sin salida.
Y pregunto: ¿Cómo participa la Humanidad en este juego del que incluso, desconoce las reglas??
¡Se dedica a competir, discutir, acaparar, involucrarse en conflictos...! A chismosear y a envidiar secreta y públicamente.
Se dedica a despojar, si puede, a los que tiene a su alcance... De manera directa o indirecta, se dedica a matar... A engañar... tanto en lo muy local (parejas, socios) como en lo nacional (política, relaciones internacionales, creencias, noticias). Esas actividades constituyen el día a día de la parte más astuta de la Humanidad; la que quiere surgir. La que persigue el éxito. La que sueña con triunfar en este mundo... Ja! ja!
Y ¿el resto? ¡Lo mismo, aunque no lo saben! Los humanos estándar, los conformes, generan energía de temor, miedo, morbo, cuando se dedican a ver películas de agresión, engaño, muerte, a presenciar espantosos asesinatos o terroríficos augurios del futuro. También cuando se asustan ante el noticiero y aceptan sus supuestas "realidades" y pronósticos.
También, para sentir emociones y creerse vivos, los más normales se emborrachan tan frecuentemente como se pueda, o usan alucinógenos sin que los pillen.
Los más sanitos, siguen los deportes con tanto fanatismo como cuando se matriculan en alguna corriente de pensamiento o en un partido político. Y allí también tienen explosiones colectivas de emoción que alimenta el Astral. Y se agreden. ¡Y se envían rayos de odio!
Y así, los políticos infiltrados o pagados por hacerlo, favorecen este estado de caos y llevan a los paises a guerras internas, o externas también con "enemigos" que ni siquiera son sus enemigos. Y de ahí sale tanta emoción negativa, que es un festín para lo oscuro. Tanto sufrimiento... tanto dolor... y se culmina con la migración resultante, el abandono del terruño... la incertidumbre, la trata... que traen más dolor, más angustia y más enfrentamiento con los ciudadanos obligados a ser los receptores de esa triste masa humana.
Lo gracioso es, que en otro nivel no tan lejano, como el Mundo de nuestras emociones y nuestros sueños, hay quienes se regocijan y nos ven como tontos útiles, perdiendo tiempo y literalmente a su servicio.
La mayoría humana, ignorantes generadores de energía baja, insatisfechos, decepcionados, rabiosos, favoreciendo sombras oscuras que de por sí, son inexistentes.
Debemos saber que esos espectro tenebrosos no nos deberían causar temor. Ellos, como todo en el Astral, son solo ilusiones... No tienen Chispa Divina, como nosotros.
Sin embargo, al portarnos agresivamente les damos algo de existencia que, las sombras ilusorias mismas se esfuerzan en mantener...
Ellos no son nada... una ilusión... como también es una ilusión imaginar que estamos pagando una pena en el Purgatorio, por ejemplo. Más, como en nuestra mente caben todas las ilusiones, las buenas y las malas que le demos permiso de tener, continuamos haciendo de nuestra vida una solemne tontería, por decir lo menos.
Una Humanidad que pudiese estar evolucionando, acercándose a su Infinito Creador... se quedó dando vueltas mirando basura en su celular, emocionada especialmente con lo malo, lo ridículo y dejando que su creatividad se atrofie totalmente.
¿Les suena conocida esta panorámica del mundo que les he mostrado? O creen que nuestra cotidianidad está bien como está?
¿Qué se les ocurre que podamos hacer?







