miércoles, 1 de enero de 2020

¿Aprobaremos el Gran Año?

¿Sí es cierto que estamos a las puertas de la clase rotulada como "VERDADEROS HUMANOS"?

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Aquí viene nuestra auto evaluación del día de Año Nuevo. 

¿Ya nos encontramos un pasito más alejados de los simples animales y un pasito más cerca de ser llamados "Humanos"?

O más bien estamos entregados a nuestra avaricia, competencia y miedo, como cualquier especie salvaje, o incluso peor, porque ya perdimos los instintos que nos solidarizaban con los semejantes y nos hacían respetarlos.
Los animales también cuidan a sus crías. No pensemos que somos muy avanzados por nuestro obsesionante concepto actual de la familia.


Estamos en un maravilloso momento de inflexión del Tiempo, 
en el que podremos "salvarnos" (dar por terminada la dura etapa de despertar 
desde el ensueño del animal hasta la conciencia del yo de un humano primitivo).
¡Ahí estamos!

¡Tanto se ha hablado del ciclo de 25.000 años del calendario Maya  anunciando que una Gran Era terminó en el 2012!
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Lo curioso es que esa cifra de 25.000 años no fue sacada de la nada por esos antiguos expertos en astronomía:

Son también 25.000 años los que se necesitan para una vuelta entera del eje de la Tierra en su movimiento de precesión, esto es, en el bamboleo que da en el espacio a medida que gira sobre sí misma y alrededor de su estrella, el Sol: La Precesión de los Equinoccios.

Tiene lógica que si en la experimentación que la raza humana realiza aquí en la Tierra, como un aprendizaje para su superación y regreso al Absoluto con mayor conciencia, se hace mediante ciclos, estos periodos se ajusten a las leyes naturales establecidas en el medio  donde dicho entrenamiento iba a llevarse a cabo. El Universo.

O sea que no tiene nada de raro que un ciclo enorme para el planeta coincida con el tiempo límite asignado por el Creador para cada uno de los cursos o ciclos de encarnación de un grupo determinado de almas. 
¡Mas bien lo raro sería que ese tiempo 
estuviera desconectado del ritmo del planeta donde ocurre!

Si entendemos que esto es así, está muy claro que nos encontramos en el momento de graduación o de "ascenso" de curso. 

Maravillosa oportunidad de ir a un nuevo nivel, probablemente no tan difícil como el que hemos vivido por 25.000 años sumergidos en esta materia, untados de ella hasta renegar de nuestra verdadera naturaleza. 

Entonces, si hemos completado todos los créditos y calificaciones necesarios, sería el momento de ingresar a una escuela superior, para pulir nuestra incipiente conciencia y entrar en la universidad de la Sabiduría. Pasaríamos al grupo de los estudiantes mayores, a los que se admira y se colabora... (No como nos tocó en esta ocasión).

¡Este es el punto! ¿Sí vamos a aprobar el Año?

La pregunta para cada uno es: ¿Qué tan merecedor soy de pasar de curso en este momento?

Si no es así, si seguimos hablando con mentiras, criticando y juzgando, sacrificando a otros por nuestro propio enriquecimiento material, 
mejor quedémonos en el curso básico otros 25.000 años de guerras, plagas, enfermedades y cataclismos, para ver si así aprendemos que SOMOS UNO y solamente trabajando en equipo con amor podremos hacer mejor la existencia de todos y ascender al nuevo nivel de conocimientos superiores, no tan rústicos y engañosos como los de ahora.

¿Queremos eso? ¿Otros 25.000 años de reencarnaciones, miedo e ignorancia?

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Por favor... ¡Programemos, por lo menos este Nuevo Año 2020 para elevar un poco nuestra vibración  este año y no estar tan desubicados el Día de la Cosecha y la graduación! 

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¡Entendamos que quedar rezagados es lo peor que nos puede pasar!