Continuando con la importancia de ser conscientes, es interesante leer en la Ley del Uno que la orientación de cada ser, especialmente en las etapas más elevadas de su evolución, debe hacerse de manera muy consciente, para que se acelere el ascenso a través de las diferentes densidades del holograma.
Pero esto, pasadas las primeras etapas del mineral, el vegetal y el animal ya no se hace de forma automática.
Pero esto, pasadas las primeras etapas del mineral, el vegetal y el animal ya no se hace de forma automática.
Para ello, se nos fue dado el Libre Albedrío que es un concepto que se acerca a lo que dice Conversaciones con Dios:
Dios quiere que hagas lo que quieras.
¡Que explores todo lo que te atraiga! Que te sumerjas en lo "positivo" y el "negativo".
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¡Pero no lo hacemos conscientemente!
De esta forma, como lo vemos en el mundo, hay personas orientadas hacia lo "positivo" (el servicio a los demás), y personas orientadas hacia lo negativo" (el servicio a sí mismo).
(Recordemos que debe ocurrir así, pues estamos en un mundo dual).
Pero para que cada persona avance,
se requiere que ésta sea una decisión consciente.
Así, un momento importantísimo en la evolución de una persona, es cuando ella se para en medio de un paisaje o del bullicio de la ciudad y dice: "Yo quiero dedicarme al servicio de mis semejantes",
O cuando respira y dice: "Yo quiero dedicarme al servicio de mí mismo".
Esta es una encrucijada definitiva que, aunque pareciera que previamente cada uno ya lo ha escogido inconscientemente, debe ser visible a la mente del participante.
De ahí en adelante la ruta se hará más clara y se podrá decir que sabemos para dónde vamos.
Lo que es sorprendente es que en este punto en la Tercera Densidad en que estamos, en la Tierra, ¡Pocos lo tenemos claro!
O ¡ojo! Creemos que vamos hacia el bien, que somos gente buena, pero nuestra vida muestra tanto egoísmo, tanta lucha por competir y por someter a los demás, que más bien se diría que estamos en el bando del "yo o ego".
La triste verdad es que desde la época del colegio hemos intentado sacrificar gente a nuestro alrededor, con el fin de subir nosotros, de disfrutar nosotros, de obtener el empleo o el contrato, sin importarnos las implicaciones sobre otras personas.
Si. Estoy de acuerdo con que es culpa del sistema en que estamos, donde prima la supervivencia del más fuerte, del más rico, del más astuto.
¡Pero también ha sido nuestra culpa aceptar principios y creencias egoístas sin cuestionarlas siquiera!
Entonces, revisemos nuestras actitudes y mirémonos desde fuera para ubicarnos decididamente como los servidores de lo positivo (buscando el bien general) o como servidores de lo negativo (buscadores del bien de nosotros mismos/ego).
Decidamos concientemente hacia dónde nos encaminaremos en adelante, para tener una vida coherente y un destino claro. Que sea clara nuestra meta.
Nota: Lo curioso, de acuerdo con lo canalizado en la Ley del Uno, es que ambas decisiones están bien. No hay una incorrecta y otra correcta. Ni una genera infierno y la otra cielo. Son simplemente caminos diferentes y ambos llevan al despertar en Dios.
Por eso en este momento vemos dos bandos. Dos fuerzas aparentemente iguales de poderosas actuando en este mundo. ¡Abiertamente tomemos partido ya!
Por eso en este momento vemos dos bandos. Dos fuerzas aparentemente iguales de poderosas actuando en este mundo. ¡Abiertamente tomemos partido ya!
(Debo reconocer que esta idea es un cambio de perspectiva que me impactó).