jueves, 25 de noviembre de 2010

El Noveno Chakra

El acceso al conocimiento shamánico oculto, más concisamente de los grupos suramericanos de Guardianes de La Tierra, complementa de manera fascinante la teoría oriental sobre la energía del cuerpo humano, añadiendo dos centros adicionales:
  • El Octavo Chakra: A pocos centímetros sobre nuestras cabezas y equivalente al "alma" del cristianismo, nos permite experimentar la conexión con toda la Creación. A la vez es el asiento de nuestra memoria existencial, por lo que conserva los registros de otras vidas y las huellas de los traumas que acarreamos de un nacimiento a otro (Karma según el conocimiento oriental).
  • El Noveno Chakra: Puro, cristalino y fuera del espacio y el tiempo, es nuestra residencia en Dios. Este chakra es único y lo compartimos todos los seres. Está en el Corazón del Universo.

Equivaldría entonces el Octavo a nuestro Durmiente, que nos facilita la visualización y el Noveno a la Escencia Universal o Sustancia Autoconciente de la que está hecho todo: seres, pensamientos, materia, luz y vacío.

Este Noveno Chakra es entonces un magnífico modelo que nos ilustra definitivamente sobre la Unidad literal con el Creador.



Mucha información sobre este tema y sobre el cuerpo energético y métodos shamánicos de curación aplicados a nuestra civilización, es suministrada en los libros del sicólogo antrópólogo Alberto Villoldo y en su escuela Los Cuatro Caminos.

Sin embargo, este es un tema básicamente oriental.