domingo, 18 de octubre de 2015

UCDM. ¡El Pecado No Existe!


El Ser no puede ser atacado ni ofendido, porque lo es Todo y todos. Lo dice Un Curso de Milagros de manera clara y hermosa, confirmando los descubrimientos de la física cuántica:

...No es posible que dos individuos puedan contemplar el pecado juntos, pues nunca podrían verlo en el mismo sitio o al mismo tiempo.

El pecado es una percepción estrictamente personal, que se ve en el otro, pero que cada uno cree que está dentro de Sí mismo.

Y cada uno parece cometer un error diferente, que el otro no puede comprender: Hermano, se trata del mismo error, cometido por lo que es lo mismo, y [es] perdonado por su Hacedor de igual manera.

¿Quién tiene necesidad del pecado? Únicamente los que deambulan por su cuenta y en soledad, creyendo que sus hermanos son diferentes de ellos.

Por ejemplo, entre dos personas que requerirían perdonarse para sanarse, porque cada una piensa que la otra actuó mal:

Ninguna de las dos entiende la actitud de la otra y se siente ofendida sin poder olvidar el agravio.

Como cuando una hija cree que la suya fue una mala madre, que no la oyó oportunamente, ni la cuidó personalmente ni le dio ternura; mientras que la madre se acongoja y malgasta en tristeza sus últimos años, pensando que su hija ya adulta la odia sin comprender las circunstancias de su actuar en el pasado.

¿Habrá gente más conectada que los hijos a los padres?


El rencor acaba automáticamente al darse cuenta -madre e hija-, de que son un mismo Ser.
Que tal vez han incurrido en la misma falta, aunque lo ven cada una en la otra.

La única falla es la falta de amor, que por una circunstancia u otra, las llevó a sentirse distintas y capaces de atacarse. Por lo demás, no ha pasado nada, porque por definición no pueden haber pecado.