Algunos dicen que son una descarga del subconciente para aligerar el estrés que sufre en el día la persona... Para limpiar el cerebro y regenerar las neuronas. Para escapar de la realidad...
Otros dicen que son premonitorios o que se trata de mensajes de una dimensión diferente.
También se ha pensado que el sueño es el alma viajando o que es una visita al plano astral.
Pero miren lo que dice Un Curso de Milagros:
Son una fabricación de nuestra personalidad, reflejando su egoismo, sus deseos mezquinos y todos sus miedos y complejos de culpa.
Los sueños son lo que el ego desea que suceda.
Son una fabricación de nuestra personalidad, reflejando su egoismo, sus deseos mezquinos y todos sus miedos y complejos de culpa.
Y no solamente eso: El mismo proceso operaría en nuestra seudo realidad. En la realidad aparente que nos rodea, proyectamos lo que el ego quiere o desea evitar que
suceda; con lo cual hacemos un mundo de egoismos, temores y envidias, realmente insoportable.
Mientras estemos convencidos de que estamos separados uno del otro, el resultado será el
mismo: Una lucha feroz entre los titanes o semidioses que somos, por lograr ilusiones
efímeras a costa y detrimento de los demás.
Un sueño (dormir) no se diferencia del otro (vivir):
Ambos son el resultado de la ambición descontrolada del Ego, que no es nuestro
verdadero Ser.
Son el producto del fantasma de la personalidad, moldeados por las circunstancias y por el
deseo que tiene el "mortal" de sobrevivir.
Pero hay un detalle que podría sacarnos de ahí: Se nos olvida que no somos mortales. Somos infinitos y eternos. Se nos olvida. Y somos Uno entre nosotros. Nadie queda por fuera...
¡Se nos olvida!