martes, 22 de marzo de 2016

¿Pueden ser Sagrados los Objetos ?



Lo usual es que cuando nos referimos a la Creación,  pensamos en la naturaleza exclusivamente: aves, montañas, bacterias, fieras, personas, flores.

Así, según el Nuevo Pensamiento, la Sustancia primigenia y única tomó de sí misma para crear bellos seres que comparten su sustancia, por definición.

Entonces, resulta que el ser humano, una de las especies de los reinos creados por el Uno, comparte Su capacidad de pensamiento e inevitablemente comienza a crear también, pero digamos que con sustancia reciclada.

El hombre de las cavernas, cuyo potencial mental y creativo es el mismo del hombre moderno, toma una rama de un árbol y hace una mesa o el techo de una casa, o tal vez una escultura... Un tótem.

Luego avanza en el tiempo, aprende algunos trucos, y de un puñado de tierra roja de aluvión, logra obtener hierro y con él, fabricar un cuchillo de la Edad de Hierro.


Entra a su vivienda, corta un pedazo de carne y lo pone a asar en su hoguera para alimentarse.

Agarra la oveja y con el cuchillo le quita la lana para hacer una tela que le sirve de abrigo a su bebé.

La pregunta ahora es:
¿De que están hechos el cuchillo,  la tela, el filete y el tótem? 

¡Pues de la Sustancia original! 

Pudo ser reutilizada o transformada mediante algún proceso físico o térmico. ¡Pero al fin y al cabo, es la misma sustancia del Todo!

No hay otro material a la mano en el universo,  de manera que, por muy artificiales que nos puedan parecer los objetos fabricados por el hombre,  ¡También comparten su esencia con Dios!

De este punto no podemos más que concluir que todo lo que nos rodea, incluyendo los objetos hechos en una fábrica, son sagrados.

¡Hasta un automóvil,  siguiendo el análisis precedente!
Porque fue hecho con el único "material" existente, a partir de la esencia de Dios!

¡Mis respetos a los objetos también!

Esto nos lleva a una visión medio panteista: Todo es Dios...
(No le encuentro falla al razonamiento deductivo realizado en esta entrada.  Por lo tanto,  lo considero verdad aunque  me implique otro cambio de paradigma).