La música y en muchos casos las letras inspiradoras de canciones que oí en diversas épocas de mi vida, me llega muy profundamente. Recuerdo que para mí era un problema estar frente a un grupo musical en vivo, porque si la tonada o el poema me tocaba el corazón, no podía evitar las lágrimas de emoción... Y según donde estuviera y con quien, era algo bastante bochornoso; especialmente porque la emoción sentida era desproporcionada. No se necesitaba que lo relatado por la canción fuera trágico... solamente que fuera inspirador. ¡Qué cosa!
Es por eso que en este blog, que es búsqueda y a la vez recapitulación, quiero colocar de vez en cuando canciones que fueron y siguen siendo importantes para mí y que probablemente dicen mucho a otros de mi generación y de las posteriores.
Para comenzar, ¡Yo quiero tener un millón de amigos!!